miércoles, 18 de noviembre de 2009

CULTURA EMO




Actualmente se puede apreciar en todo el mundo representantes o seguidores de la cultura emo, una subcultura que surgió en los Estados Unidos a mediados de la década de 1980. Mucho es lo que se habla sobre este grupo hoy en día, pero mucho es también lo que se inventa. Inclusive muchos adolescentes que aseguran ser emos en realidad ni siquiera están cerca de serlo, pues la cultura emo no es únicamente estética, ella persigue una fuerte filosofía.

Como dijimos esta subcultura se origina en los Estados Unidos, más precisamente en la ciudad de Washington DC, como un genero musical post-hardcore, que rápidamente debido al contenido emocional y expresivo de sus letras fue definido como emotional hardcore, y posteriormente abreviado como emo-core. Su estilo musical deriva del hardcore punk con la diferencia de ser más lento y melódico.

Se considera el nacimiento del genero emo-core el lanzamiento del disco Rites of Spring de la banda homónima en el año 1985. Los seguidores de la cultura emo rápidamente comenzaron a masificarse y a buscar su propia identidad, que los diferenciase de otras tribus urbanas con las que tenían más de un punto de contacto pero que sentían ser sustancialmente diferentes como los punks y seguidores del grunge.

Pero en la actualidad los emos se han multiplicado por millones al rededor del planeta y muchos adolescentes que ni siquiera conocen a las bandas fundadoras de esta subcultura dicen ser emos tan solo por llevar un peinado y vestirse de negro y rosa. Los emos han sido atacados en infinidad de oportunidades por diversos grupos tras ser considerados un flagelo social y muchas veces considerar que es el paso previo o una forma de esconder la homosexualidad.

Hoy en día la cultura emo no pone a la música como su bandera, o la pone pero erróneamente. Muchas bandas que se jactan de ser emo-core y en realidad ni cerca están de las incipientes Rites of Spring, Fugazi, Embrace, Sunny Day Real Estate, Bad Religión, Jawbreake, Jawbox o Sense Field, entre otras.

La masificación del género musical y la apropiación del término por parte de las discográficas multinacionales para embaucarlo en cualquier banda con el fin de obtener mayores ventas ha generado el disgusto de los emos de la primera ola.

Esto dio lugar a que surgiera a mediados de los 90’ el surgimiento del término screamo (falso emo) y con el nuevas bandas que se diferenciaban de las emo. Pero detrás de ello surgió una nueva ‘moda emo’ en que los jóvenes perseguían un estereotipo de tristeza, visión desesperanzada de la vida, auto-mutilación y expresión de emociones. Con esta nueva generación que crecía como una bola de nieve en descenso no tardó en llegar el negocio y cualquier banda fue calificada como emo o screamo con el único fin de masificar sus ventas. Las bandas más renombradas y falsamente encajadas dentro de estos generos han sido Green Day, Panda, My Chemical Romance, Panic! at the Disco, Fall Out Boy, 30 Seconds to Mars, From First to Last, Silverstein, The Devil Wears Prada, Underoath, The Used, Alesana, entre otros.

Información sobre la cultura emo La cultura urbana emo es muy sencilla de diferenciar, quienes se hacen llamar emos y pretenden serlo generalmente llevan un estilo de peinados parecidos, con un jopo tirado hacia un lado y cubriendo uno de sus ojos. Para estos jóvenes (generalmente entre 14 y 20 años de edad) la tristeza es la mejor compañera de ellos y en sus pares encuentran el amor y sentimiento de pertenencia. En la música encuentran una forma de ser, un guía que los ayuda a seguir un camino para ellos muchas veces tortuoso, donde los transeúntes los observan como extrañas anomalías.

Los hemos dicen basar su diferencia con el punk londinense simplemente en el compás de la batería, quizá allí comience la diferencia porque realmente son bastantes con los representantes del punk.

Los jóvenes emos del siglo XXI persiguen una actitud y filosofía crítica de la sociedad centrada en la emociones (dolor, rabia, desgano e insatisfacción) y que encuentra semejanzas con los punkys en la rebeldía y la necesidad de trillar las calles y sentirse urbanos. La tristeza que los caracteriza suele quedar de lado cuando de una fiesta se trata, allí sacan a relucir su sarcásticos e irónico humor.

1 comentario:

  1. ha esta basura le llaman cultura si esto es la degradez de la raza humana

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